El ritmo es una forma para que las personas con dolor crónico equilibren y administren sus tareas para evitar un brote grave del que puede ser difícil recuperarse y que puede causar contratiempos personales y estar asociado con la depresión. El ritmo implica aprender qué cantidad de una actividad determinada puede realizar de forma segura y sin un brote. Este método de estimulación puede ayudarlo a controlar su dolor de manera más efectiva y mejorar su vida diaria.
Pasos
Parte 1 de 3: Comprender la importancia del marcapasos
Paso 1. Planifique establecer límites saludables como parte de su ritmo
Ya sea para alcanzar metas personales o complacer a otros, las personas con dolor crónico pueden encontrarse haciendo más de lo que pueden hacer físicamente. Esto puede provocar un brote que podría evitarse si no intentara hacer todo a la vez.
- El ritmo les da a las personas con dolor crónico la posibilidad de establecer límites y no esforzarse demasiado y causar más daño a su cuerpo. Es fundamental para un mejor manejo del dolor crónico.
- La idea detrás de la estimulación es que debe detenerse antes de que el dolor sea demasiado. Es mejor hacer una serie, una cantidad menor de actividad todos los días que esforzarse demasiado en un día y luego verse obligado a evitar la actividad durante varios días a partir de entonces.
Paso 2. Adopte el ritmo como un medio para obtener una experiencia y una perspectiva más positivas
El marcapasos puede ayudar a las personas con dolor crónico a liberar la tensión y aliviar la sensación de frustración o depresión.
La depresión puede ocurrir si no puede completar una tarea o actividad deseada durante un brote. Debido a que el ritmo exitoso le permite hacer un poco de actividad todos los días, es posible que pueda disminuir estos sentimientos negativos
Parte 2 de 3: Aprender a seguir el ritmo
Paso 1. Establezca límites de tiempo
Solo haga las tareas durante un período de tiempo determinado y luego tome un descanso para que se detenga antes de que el dolor aumente por hacer demasiado.
- El umbral de actividad de cada persona es diferente y también varía según el día o la actividad. Preste atención a su cuerpo y cómo se siente al realizar las tareas habituales.
- Configure un temporizador en su teléfono, digamos, de 5 a 20 minutos (según sus capacidades y la actividad). Luego deténgase, siéntese y tome un descanso de 5 a 10 minutos antes de continuar. Su objetivo es tomar un descanso antes o cuando su dolor comience a aumentar, mucho antes de que llegue a una etapa grave o inmanejable.
- Ajuste sus propios límites según sea necesario. Todos tienen diferentes marcos de tiempo para el tiempo que pueden hacer una tarea y poder manejarla con sus límites de dolor. No base sus marcos de tiempo en los de otra persona, porque pueden ser demasiado largos para su cuerpo. Experimente y ajuste según sea necesario para encontrar el marco adecuado para usted.
Paso 2. Separe su tarea en partes manejables
Hacer su tarea en partes puede parecer molesto, ya que puede llevarle más tiempo completarla. Sin embargo, te ayudará a largo plazo. Al hacer tiempo para descansos cortos, reducirá el riesgo de que su dolor aumente hasta el punto en que no pueda completar la tarea en absoluto.
Evite sobrepasar los límites actuales de su cuerpo. Si repasas lo que tu cuerpo es capaz de hacer durante una tarea, aunque sea un poco, esto podría provocar un brote que podría evitarse si equilibras tus tareas
Paso 3. Concéntrese en metas realistas para usted
Fíjese metas en las que trabajar para asegurarse de mantenerse al tanto de su ritmo, pero también de no renunciar a sus tareas.
- Establecer metas asegura que usted todavía esté activo y haciendo lo que puede hacer sin darse por vencido. Después de todo, no realizar ninguna actividad también puede provocar un brote.
- El uso de objetivos también lo ayuda a trabajar hacia las ambiciones. Al trabajar en una pequeña meta a la vez, eventualmente podrá hacer algo que desearía poder hacer, pero que físicamente no puede en este momento.
Parte 3 de 3: Adoptar la relajación saludable
Paso 1. Encuentre el tipo de descanso que mejor se adapte a sus necesidades
Algunas personas necesitan descansar recostadas durante períodos prolongados, mientras que otras que sufren de dolor crónico pueden no encontrar esto beneficioso. Pruebe diferentes métodos de relajación para ayudarlo a descubrir qué le ayuda a manejar mejor sus niveles de dolor.
Asegúrese de que cuando pasee, sus descansos no sean más cortos de lo que necesita para recuperarse realmente; los descansos demasiado cortos no le ayudarán a recuperarse
Paso 2. Di no cuando lo necesites
Si ya ha hecho algo que le resultó físicamente difícil, lo más probable es que necesite descansar después para evitar cualquier hiperactividad que pueda provocar un brote. Si estás descansando y alguien te pide que hagas algo, tienes derecho a decir que no, porque tu salud es lo primero.
- Escuche a su cuerpo. Si su nivel de dolor es alto, debe concentrarse en descansar para reducir el dolor.
- Tú conoces mejor tu cuerpo. Si sabe que no está listo para volver a ser activo, acéptelo. Debe concentrarse en su propia salud y bienestar, no en otras cosas.
Consejos
- Tenga paciencia con el ritmo. Se necesita práctica para aprender a hacerlo correctamente y adaptarse a sus necesidades, así que sea constante para que sea beneficioso para usted.
- No temas que otros te juzguen. Si el marcapasos es algo que necesita para ayudarlo a controlar su dolor de manera más efectiva, los demás lo entenderán.
Advertencias
- No se apegue a su límite especificado si es demasiado para una tarea específica. Si siente que su dolor aumenta antes de la hora establecida para descansar, deténgase y descanse inmediatamente para evitar un aumento del dolor. Continúe con la tarea cuando crea que es seguro hacerlo.
- Establezca siempre las tareas dentro de sus límites físicos. No se esfuerce más allá de estos límites, ya que esto podría causar un daño grave a su salud.