Blanquear sus dientes puede ayudarlo a sentirse más seguro de sí mismo. Sin embargo, también puede provocar encías sensibles o irritadas. Sin embargo, no se preocupe. Hay varios pasos que puede tomar para proteger sus encías durante el blanqueamiento dental para minimizar las molestias y aún así terminar con una sonrisa deslumbrante.
Pasos
Parte 1 de 3: Visite a su dentista antes del blanqueamiento
Paso 1. Concierte una cita para un examen dental y una limpieza
Antes de comenzar cualquier tratamiento de blanqueamiento, debe consultar a su dentista. Pueden tomar radiografías, hacerle un examen y tratar cualquier problema dental que tenga. También debe limpiarse los dientes, ya que los tratamientos de blanqueamiento serán más efectivos e incluso en los dientes limpios.
Por ejemplo, debe rellenar las caries antes de blanquear los dientes para evitar problemas agravados y dolor a causa del blanqueador
Paso 2. Pídale a su dentista que le recomiende un tratamiento blanqueador
Su dentista podrá examinarle los dientes y sugerirle el mejor método de blanqueamiento para su caso particular. También pueden recomendar productos o estrategias para ayudarlo a proteger sus encías mientras blanquea sus dientes. El tipo de decoloración que tenga dictará el mejor tratamiento.
- Por ejemplo, sus dientes pueden tener manchas extrínsecas en las que el esmalte, o la capa externa de sus dientes, se decolora por comer o beber alimentos y bebidas oscuros, como café y vino, o por fumar o mascar tabaco.
- Alternativamente, sus dientes pueden tener manchas intrínsecas, en las que la dentina interior se decolora por el exceso de fluoruro o ciertos medicamentos como clorhexidina, minociclina o incluso antihistamínicos.
Paso 3. Siga cuidadosamente los consejos de su dentista para obtener mejores resultados
Su dentista puede recomendar un tratamiento realizado en el consultorio dental, en cuyo caso se encargará de proteger sus encías durante el tratamiento de blanqueamiento. Por lo general, el dentista usará una solución más fuerte para blanquear sus dientes que la que se encuentra disponible sin receta, y puede usar luces o un láser para acelerar el proceso.
De lo contrario, su dentista puede recomendar un tratamiento en casa, como bandejas blanqueadoras o tiras blanqueadoras. Pida sugerencias sobre qué marca usar si sugieren un remedio de venta libre y nunca use un agente blanqueador más fuerte que el recomendado por su dentista
Parte 2 de 3: Uso de tratamientos blanqueadores caseros
Paso 1. Seleccione bandejas a medida, si corresponde
Si su dentista recomienda el uso de bandejas blanqueadoras, evite comprar un kit con bandejas de "talla única". Es probable que estas bandejas sean más grandes que sus dientes, lo que significa que el blanqueador se presionará contra sus encías, causando sensibilidad o irritación. En su lugar, opte por bandejas a medida. Su dentista puede hacerlos por usted, y también hay kits en los que usted hace un molde de su boca, lo envía a un laboratorio y recibe bandejas personalizadas.
Paso 2. Recorte las tiras blanqueadoras para que se ajusten a sus dientes si es necesario
Las tiras blanqueadoras suelen ser mucho más grandes que los dientes y, por lo tanto, terminan depositando gel blanqueador en las encías, provocando dolor o sensibilidad. Antes de usar tiras blanqueadoras, sosténgalas contra sus dientes para determinar qué tan bien le quedan. Si es necesario, use un par de tijeras afiladas para recortar el exceso de material.
Paso 3. Aplique un gel desensibilizante en sus encías antes de blanquear sus dientes
Si tiene encías sensibles, es posible que desee utilizar un gel desensibilizante antes de un tratamiento blanqueador. Pídale a su dentista una recomendación, luego aplique el producto como se indica. En general, esparcirá una capa ligera de este gel desensibilizante sobre las encías unos minutos antes de cada tratamiento de blanqueamiento para protegerlas de la lejía.
Paso 4. Elimine el exceso de gel blanqueador o lejía de sus encías
Después de colocar las bandejas blanqueadoras o aplicar las tiras blanqueadoras, use un pañuelo para limpiar el exceso de gel de sus encías. Esto evita que el blanqueador le irrite las encías y las protege de las quemaduras químicas leves que causan molestias.
Si es necesario, puede volver a aplicar el gel desensibilizante con un hisopo de algodón si lo limpió junto con el exceso de gel blanqueador o lejía
Paso 5. Deje las tiras o las bandejas puestas solo durante el tiempo recomendado
No deje las tiras blanqueadoras o las bandejas blanqueadoras puestas durante un período de tiempo más largo de lo que sugieren las instrucciones, ya que esto puede provocar dolor o sensibilidad. Tampoco ayudará a que sus dientes se vuelvan más blancos. Siga las instrucciones cuidadosamente y retire las tiras o bandejas después del tiempo recomendado.
Puede repetir el tratamiento al día siguiente para blanquear aún más sus dientes, si lo desea
Parte 3 de 3: Lidiar con la sensibilidad
Paso 1. Use una pasta de dientes formulada para dientes y encías sensibles
Hay muchos tipos de pasta de dientes diseñada para usar en dientes y encías sensibles fácilmente disponibles. Generalmente, estos productos contienen nitrato de potasio, que en realidad actúa para desensibilizar los dientes y las encías. Si blanquear sus dientes le ha causado dolor o sensibilidad, use una de estas pastas dentales en lugar de su tipo habitual para reducir la irritación.
Paso 2. Cambie a un agente blanqueador más débil si tiene problemas
Si sus encías están doloridas, sensibles o irritadas después del primer tratamiento de blanqueamiento, es posible que la lejía o la solución sean demasiado fuertes. Generalmente, los productos de venta libre tienen una concentración de peróxido de carbamida que varía entre el 10 y el 20%. Si su producto tiene una concentración superior al 10%, cambie a una concentración más baja para la siguiente ronda de blanqueamiento.
Paso 3. Evite blanquear sus dientes cuando sus encías estén sensibles
Si sus encías ya están irritadas o sensibles debido a los tratamientos de blanqueamiento, debe evitar hacer más tratamientos hasta que sanen. Esto no solo protegerá sus encías, sino que también protegerá sus dientes. Una vez que sus encías hayan sanado y ya no sienta dolor, irritación o sensibilidad, puede reanudar los tratamientos de blanqueamiento.
Paso 4. Retoque sus dientes solo después de 4-6 semanas
Una vez que haya blanqueado sus dientes a un tono deseable, no continúe blanqueándolos con frecuencia. Esto puede provocar una hipersensibilidad de sus dientes y encías. Además, sus dientes se volverán muy blancos, por lo que puede terminar desperdiciando su dinero. Trate de hacer otro tratamiento blanqueador cada 4 a 6 semanas, pero no más a menudo.